De la Rosca de Reyes a los Tamales Picantes
El 6 de enero, Día de Reyes, las familias y amigos se reúnen para compartir este pan dulce adornado con frutas cristalizadas y, escondido en su interior, pequeñas figuras del Niño Dios. La tradición dicta que quien encuentre una de estas figuritas en su rebanada se convierte en el anfitrión de la próxima reunión, el 2 de febrero, Día de la Candelaria. Y ¿qué se sirve en esta celebración? ¡Tamales, por supuesto! Muchos de ellos picantes que acentúan más con sus chiles el sabor de México. Aquí te presento algunas características de los tamales picantes que comemos en México.
¿De qué son los Tamales picantes?
Los tamales, ese manjar envuelto que forma parte fundamental de la gastronomía mexicana, alcanzan su máxima expresión cuando incorporan los chiles más intensos del país ya sean chiles secos o chiles frescos. Entre la gran variedad de tamales que existen en México, los picantes ocupan un lugar especial en la mesa y el corazón de los mexicanos. Así que si te ha tocado el muñequito, te presento las características de diferentes tamales picantes con los que podrás pagar tu deuda en el día de la candelaria.
Los chiles protagonistas en los tamales
El chile habanero reina en los tamales yucatecos, aportando un picor intenso y frutal que hace sudar hasta a los más valientes. En el centro del país, el chile serrano y el chile de árbol son los preferidos para dar ese toque ardiente que caracteriza a los tamales rojos. La región de Oaxaca sorprende con sus tamales de chile chilhuacle negro, un ingrediente exclusivo de la zona que aporta un picor profundo y ahumado.
Variaciones regionales de los tamales picantes
En Veracruz, los tamales picantes se preparan con una mezcla de chiles secos como el morita y el chipotle, envueltos en hoja de plátano, lo que les confiere un sabor ahumado característico. En este artículo encontré otras versiones de tamales veracruzanos y comidas que aunque son envueltos en hoja, no llevan masa de maíz y reciben otros nombres. Por su parte, en el norte del país, específicamente en Coahuila y Nuevo León, los tamales incorporan el chile piquín silvestre, creando una explosión de sabor y picor.
La envoltura varía según la región: mientras que en el centro y norte del país predomina la hoja de maíz, en el sur y sureste la hoja de plátano es la elegida, aportando un sabor particular y una humedad característica al tamal.
Los rellenos y opciones de los tamales
Los rellenos tradicionales incluyen carnes como cerdo, pollo o res, pero la evolución gastronómica ha dado lugar a opciones veganas igual de picantes. Destacan los tamales de champiñones con chile manzano, los de rajas con queso y los de frijoles con chile morita que es un chile seco.
Considera la temporalidad de algunos tamales
Aunque los tamales picantes se disfrutan todo el año, algunas variedades alcanzan su máximo esplendor en temporadas específicas. Por ejemplo, los tamales de chile chilhuacle son más comunes durante las festividades de Día de Muertos en Oaxaca, mientras que los de chile habanero fresco son más abundantes durante la temporada de cosecha de este chile, entre julio y octubre.
Es importante mencionar que el nivel de picor puede ajustarse según el gusto, pero los verdaderos amantes del picante buscan aquellos que llevan la máxima cantidad de chile que la receta permite sin comprometer el sabor del tamal.
La tradición de los tamales picantes sigue viva y evolucionando, fusionando los sabores ancestrales con técnicas modernas de preparación, pero manteniendo siempre ese fuego característico que los hace únicos en la gastronomía mexicana.